¡Por fin!
No sé a vosotros pero a un servidos se le ha hecho eterna la aparición de la segunda entrega (pincha aquí para comprarlo) de The Private Eye de Marcos Martín, Brian K. Vaughan y Muntsa Vicente. Sí, así era de bueno y así fueron las ganas con las que me quedé de seguir leyendo la historia que estos artistas nos estaban contando. ¿Ha merecido la pena esperar?
Investigando al detective
Después del primer gran número donde Martín y Vaughan nos introdujeron en este mundo post-Internet continuamos con las aventuras de nuestro detective el cual acaba de descubrir que está metido en un lío muy gordo y del cual no sabe absolutamente nada.
Al poco de comenzar la investigación de Taj descubre que ha sido asesinada y decide que es mejor pasar del tema para no acabar convirtiéndose en un cliché de detective de genero negro el cual arriesga la vida por la femme fatale de turno. Pues error amigo, ya estabas dentro desde que la difunta Taj fue a visitarte. Lo quiera o no Patrick Immelmann deberá seguir adelante y descubrir quién mató a Taj y por qué, en qué estaba metida y de paso evitar que La Prensa acabe metiendole en “Lompoc o algún sitio peor” (sea lo que sea lo que signifique “Lompoc”).
El mundo Post-Internet
Aún nos queda mucho por conocer de este mundo de identidades secretas (Ónimo) sin Wifi e internet y siendo esta solamente la segunda parte de 10 no vamos a saberlo todo de golpe. El hecho de que aún nos quede bastante hace que la trama no avance tanto como nos gustaría ni descubramos todo sobre este mundo. Por el momento los autores nos van regalando pequeñas pinceladas con las que hacernos una idea de cómo funciona todo, como por ejemplo el detalle de cierta ayudante de nuestro protagonista a partir de la cual descubrimos que hay una mayoría de edad para empezar a usar ónimos, que Patrick no sabe conducir y que está totalmente obsesionado con la seguridad y con ocultar toda la información personal posible. Viendo cómo acaba el cómic casi dan ganas de darle la razón a nuestro paranoico protagonista.
Marcos, Brian y Muntsa
Dibujante, guionista y colorista ¿Mantienen el nivel? ¿Se superan? ¿La han cagado?
A mi parecer la respuesta es sencilla: Mantienen el nivel, pero es que el nivel es alto.
Marcos Martín sigue dibujando como pocas veces se le ha visto, aprovechando el formato digital y dibujando las páginas como su formato exige, cuidando también la composición de página la cual ayuda a que la narración del cómic sea muy cinematográfica. Del guión aún es pronto para hablar, como ya he dicho la trama no avanza tanto como gustaría pero da la sensación de ir lentas pero seguras a la vez que vamos descubriendo más de los protagonistas y el ambiente que los rodea. Habrá que seguir leyendo para ver cómo se desarrolla todo lo que Vaughan está poniendo sobre la mesa.
¿Y Muntsa Vicente como colorista? Grandiosa. Martín hace muy bien lo que sabe hacer pero Muntsa es quién le da color y vida al rico mundo que están creando.
En definitiva, la sensación que sigue dejando esta serie es buena y a la espera de saber como continua la trama solo puedo recomendaros que hagáis una cosa:
Aunque lo descarguéis gratis para leerlo, si os ha gustado, pagad por este muy buen cómic.
El artículo The Private Eye 02. Más máscaras apareció primero en GenComics.